Cambian los tiempos, cambian las personas que pilotan la nave, cambian los recursos y procedimientos a utilizar, pero hay algo que permanece: los objetivos a alcanzar.
Los integrantes de la nueva Junta de Gobierno, a la espera de la ratificación por la Asamblea, estamos aún en proceso de atraque, y solicitamos la ayuda y el apoyo de quienes nos precedieron en esta responsabilidad, muy especialmente, de aquellos de los que hemos recibido el testigo, para no estrellarnos contra los diques de abrigo del puerto, y enfilar la bocana con acierto. Igualmente, solicitamos la colaboración de todos los asociados en esta nueva etapa de la Asociación de Vecinos.
Afortunadamente, hasta hoy - y esperamos que siempre - hemos podido contar con la colaboración abierta de la Junta Directiva saliente, de la que tres de sus miembros continúan con nosotros en este afán de mejorar el barrio en beneficio nuestro y de nuestros convecinos. Y de ellos hemos recibido, como fruto de su trabajo, las normas que rigen el funcionamiento de la Asociación, y que regulan nuestros derechos y deberes. Les hablamos de los Estatutos.
Como Junta Directiva nos hemos propuesto, en primer lugar, que los asociados conozcan los mecanismos de elección y funcionamiento de los órganos de gobierno, y también los derechos que les asisten y las obligaciones que asumen por su condición de socios. No es fácil, en la situación económica actual, poder entregar a cada socio una copia de los Estatutos, pero, aprovechando que la afición entra los jóvenes a las nuevas tecnologías hace que sea raro el hogar que no cuente con un ordenador y acceso a internet, hemos puesto una copia de los mismos en este medio, para que puedan leerlo, bajarlo, o imprimirlo, si así lo desean.
Para que ello sea posible, y para facilitar una mejor comunicación entre la Junta Directiva y los asociados, nace hoy el blog de la Asociación de Vecinos. Lo hemos titulado Vecinos y Ciudadanos, para destacar que nuestro esfuerzo irá encaminado no sólo a la mejora del barrio, sino también a la mejora de las relaciones y la colaboración entre vecinos, y a reclamar el derecho y la obligación de participar, que como ciudadanos nos asiste, en todo aquello que, promovido por instituciones públicas o privadas, afecte al barrio y a quienes lo habitan. También porque esperamos sus sugerencias y críticas ante las actuaciones u omisiones que tengamos como Junta Directiva.
