miércoles, 22 de diciembre de 2010


Club de senderismo Cañaveral
El sendero entre la Caldera y Pinolere está repleto de encanto. Es una pateada fácil, sin mucho esfuerzo. Aunque la recta final es bastante pendiente y las rodillas se resintieron, fue un verdadero placer caminar sobre el lecho dorado de hojas de castaño caídas por el viento. Ese tramo se convirtió en un no parar de recoger castañas, las había a montones y los niños que nos acompañaban lo pasaron genial jugando a ver quién cogía más.
La próxima ruta será en enero y haremos “las siete cañadas”, una de los senderos mas esperados por los miembros de nuestro club. La imagen constante del Teide y el paisaje lunar que envuelve la ruta, la convierte en una de las mas bellas de las islas. Será una experiencia inolvidable.

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